Los cuidados son todas aquellas actividades que son fundamentales para la reproducción de la vida humana y del planeta: alimentarse, curarse cuando hay necesidad, garantizar una vida digna para las personas mayores, contribuir al sostenimiento del planeta, garantizar las necesidades de bienestar físico y emocional de todas las personas, etc. También son una dimensión fundamental de la economía y una actividad básica para el funcionamiento de los sistemas socioeconómicos.
No obstante, consideramos que el actual modelo de desarrollo desprecia la vida y, por tanto, estas actividades fundamentales para mantener la vida a flote permanecen en esferas invisibilizadas, desvalorizadas y feminizadas. Las ofensivas del sistema económico actual se soportan fundamentalmente en los hogares y a través del trabajo no remunerado de las mujeres o del empleo del hogar (generalmente de mujeres migrantes) en base a relaciones de desigualdad (entre hombres y mujeres, entre los países del norte y los países del sur, etc.). Estas relaciones de cuidados sostenidas en espacios ocultos y basadas en relaciones de desigualdad traen graves consecuencias para el sostenimiento de la vida y para el bienestar de las personas que proveen cuidados (generalmente mujeres) y de quienes los reciben.
¿Cómo podemos avanzar hacia una organización social más justa de los cuidados? ¿Por qué creemos que los cuidados deberían formar parte de cualquier intervención política? ¿Cómo podríamos incorporar la perspectiva de los cuidados en nuestras prácticas personales, profesionales e intervenciones políticas?
¿Quién cuida a quién? Hacia una organización social de los cuidados más justa pretende ofrecer algunas herramientas desde la economía feminista para, por un lado, profundizar en la comprensión de los cuidados y en su papel en el actual modelo de desarrollo y, por otro, pensar líneas estratégicas para, asumiendo nuestras responsabilidades como sociedad, avanzar hacia un derecho digno y universal a los cuidados.
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