Un año más, con motivo del 8 de marzo, día internacional de las mujeres, aprovechamos desde diferentes espacios y ámbitos de actuación para escribir artículos, participar en actos y manifestarnos en las calles con el fin de reivindicar, otra vez, que los derechos de las mujeres deben ser cumplidos y respetados sin más excusas, y que la brecha existente entre lo que dicen las normativas internacionales, constituciones o leyes y lo que nos muestra día a día la propia realidad, sigue siendo demasiado grande y escandalosa. Por eso, desde la campaña Elijo Solidaridad -y desde la propia FONGDCAM- nos sumamos a estas reivindicaciones y las hacemos nuestras, pues no podemos luchar por un mundo más justo y equitativo sin abordar de raíz esta grave vulneración de derechos que es la desigualdad por motivos de género.
Las ONG de Desarrollo (ONGD) madrileñas venimos trabajando desde hace muchos años en diferentes países del mundo para promover procesos de desarrollo mediante los cuales las personas que participan en ellos puedan alcanzar una vida digna. En estos procesos hemos tenido la oportunidad -y también la inmensa suerte- de trabajar y conocer de cerca la lucha de numerosas organizaciones y movimientos de mujeres que, desde cualquier rincón del mundo, pelean día a día por defender sus derechos y hacerlos respetar, como ciudadanas de pleno derecho. Son mujeres indígenas, campesinas, negras, mestizas, urbanas, rurales, con estudios, sin ellos… mujeres diversas y valientes todas, que tienen en común vivir situaciones de discriminación y desventaja por el mero hecho de ser mujeres. Y con ellas hemos aprendido también que la raíz de los problemas que padecemos es común en cualquier lugar del mundo (a pesar de las especificidades de cada contexto), pues se trata del incumplimiento de nuestros derechos como mujeres y que, por tanto, nuestra lucha debe ser común y global, pues para cambiar esta realidad debemos trabajar fundamentalmente por la trasformación de este modelo de vida y sociedad insostenible que nos impide realizar nuestros derechos plenamente. Ésta es también la base de la solidaridad entre los pueblos y entre los movimientos de mujeres que las ONG de desarrollo impulsamos al hacer propios los problemas de otras personas, por muy lejos que estén. Porque luchando por superar estos problemas estamos luchando por defender nuestros derechos también.
Por eso, en fechas como este 8 de marzo, queremos recordar y visibilizar estas luchas de los movimientos de mujeres, de aquí y de allá, y también proclamar que vamos a seguir trabajando por ello mientras la realidad siga empeñada en mostrarnos que queda mucho camino aún por recorrer (a modo de ejemplo, basta decir que las mujeres son el 70% de las personas que viven en extrema pobreza en el mundo), a pesar de los indudables avances. Este año se cumplen además 20 años de la celebración de la IV Conferencia Mundial sobre las Mujeres(celebrada en 1995 en Beijing –China) que reafirmó que los derechos de las mujeres son derechos humanos y cuyo Plan de Acción ha supuesto un referente para las organizaciones feministas y de mujeres de todo el mundo. Ojalá que la conmemoración de este importante hito y la celebración de este nuevo 8 de marzo nos sirva, no solo para celebrar lo logrado y recordar lo que queda por alcanzar, sino también para concienciarnos que esta lucha debe ser diaria (las mujeres lo sabemos bien…) y que no podemos ni debemos bajar la guardia. Pues sin derechos de las mujeres, no es posible el desarrollo.
Este domingo de nuevo ¡nos vemos en las calles!
Nuria Tovar Velázquez. Iniciativas de Cooperación Internacional para el Desarrollo (ICID) Vocal de Género de la FONGDCAM